Entendiendo al ser humano mediante la literatura

Introducción

Como psicólogo mi objetivo esencial cuando trato a una persona es comprenderla. Una vez que la he comprendido puedo utilizar una amplia batería de herramientas para acompañarlo a solucionar su problema.

La parte más complicada de mi profesión es comprender a la persona. Fácil de decir y muy difícil de llevar a cabo. Porque no hay dos personas iguales, y lo que puede ser beneficioso para una puede que no sea para la otra. Cada una de las formaciones que he realizado en psicoterapia enfoca este proceso de forma diferente. Lo que tienen en común todas es unos contenidos prácticos y otros teóricos.

Los prácticos son fáciles de asimilar, porque en el contacto con otras personas es donde los aprendizajes se asientan más sólidamente.

Para mí los contenidos más difíciles de asimilar son los teóricos ¿Cómo se puede abarcar toda la complejidad del ser humano en una serie de conceptos teóricos? Ese es el gran problema al que se enfrentan los libros o artículos con un carácter más científico. Los ejemplos que plantean son claros, pero también restringidos porque siempre hay excepciones a las reglas que  plantean. Además tratan de justificar su punto de vista, si tú no lo compartes probablemente la utilidad que obtengas de él no sea la deseada.

Sobre la literatura

Mi gran pasión es la literatura. Siempre que tengo un hueco saco mi libro de turno y me pongo a leer. Puede ser esperando el autobús o en la cola del supermercado, y nunca salgo de casa sin un libro. Lo que realmente me apasiona es la narrativa, aunque puedo leer filosofía o teatro. Pero todo esto desaparece cuando tengo que leer tratados de psicología sea de la corriente que sea, salvo pequeñas excepciones de las que algún día hablaré. No voy a decir que es una tortura pero se le acerca bastante.

Hace unos meses, un profesor de una formación que estoy realizando (Juanjo Albert) ante la pregunta sobre bibliografía enfocada a entender el carácter de las personas, respondió de una manera sorprendente: “Leer literatura, en ellos encontrareis lo que ningún manual puede enseñaros”

Como interpreto yo esta frase de mi profesor. Cuando el escritor es bueno:

• La historia que se narra y la relación que se establece entre los personajes, siempre va a resultar más cercana a la experiencia del lector que lo que se narra en un ensayo.

• Cada lector  va a encontrar diferentes interpretaciones que le van a llevar a experiencias diferentes.

• Por eso se habla  releer a los grandes escritores, ya que dependiendo del momento de tu vida en el que te encuentres, puedes interpretar el mismo pasaje que leíste hace años de manera completamente diferente.

• En ensayo trata de explicar por eso intenta tener en cuenta la mayor cantidad de variables, la novela intenta llevarte a la experiencia emocional lo que hace que sea más fácil retener la experiencia.

Entendiendo al ser humano mediante la literatura

El propósito de este artículo es describir como los grandes autores me han ayudado a entender algunas de las experiencias más inherentes del ser humano.

1. Charles Dickens: Cada ser humano es único e irrepetible

¿Porqué es para mí Dickens el escritor más grande de todos los tiempos? En las novelas del escritor inglés tienden a aparecer una gran cantidad de personajes: Los principales, los secundarios y los “figurantes”.

 Dickens es el único escritor que he leído que es capaz de darle a cada uno de los personajes, independientemente de la importancia que tengan, un rasgo o rasgos que los hace diferentes y fácilmente reconocibles para el lector, aunque hayan transcurrido 300 páginas desde la última vez que aparece el personaje en cuestión.

Puede ser un tic, la manera peculiar en que se coloca el sombrero, muletillas verbales o sudoración excesiva. Jamás encontrarás un rasgo que se repite en los personajes de una novela a otra. Impresionante.

 2. Franz Kafka: Entendiendo la neurosis

Hace más de 10 años que no leo a Kafka. Vale que lo he leído casi todo de él, pero hay una antología de cuentos que tengo en mi librería, que a pesar de mi deseo, no me decido a leerlo. Para mi Kafka es el escritor más original al que me he enfrentado, con un estilo irrepetible y atractivo, que me apasiona. ¿Por qué se me resiste esa antología?

Los escritos de Kafka sean novela larga, cuentos o diarios tienen varias características en común: desesperanza, frustración y aislamiento.

La neurosis es todo aquello que nos hace infelices, presentándose esta infelicidad por medio de síntomas (ansiedad, fobias, adicciones) o mediante actitudes (exigencia, perfeccionismo) Todas las personas tenemos algo de neurosis. Su peculiaridad es que al final acaban produciendo desesperanza, frustración o aislamiento.

Cuando yo leía a Kafka estaba inmerso en mi neurosis y me sentía completamente identificado con lo que describía en sus escritos. Me ayudó a comprenderme. Durante estos años estoy intentando mantener a raya mi neurosis, por eso el genio checo no tiene cabida en mi vida en este momento.

3. Fiodor Dostoievsky: Las contradicciones del ser humano

Imposible resumir en pocas líneas la complejidad del genio ruso. Uno de los escritores más inmensos a los que me he enfrentado nunca. Las novelas de Dostoievsky me desconciertan, porque resulta difícil predecir el comportamiento de sus personajes. Sus novelas son como puzles cuyas piezas acaban encajando al final. Son tratados sobre la complejidad del ser humano.

A veces me desconciertan mis propias reacciones pues son contrarias a mis principios. Puedo entender lo que motiva estos comportamientos pero no impedir que estos se repitan. Las novelas de Dostoievsky me han ayudado a asumir con humildad que es mejor no criticar lo que hace el otro, pues yo puedo llegar a hacerlo en alguna ocasión. “Nunca digas de esta agua no beberé”

4. Stephen King: La compulsión

Siempre leo varios libros a la vez. Normalmente un clásico, una novela contemporánea, un ensayo divulgativo y un “anestésico literario”. Te preguntarás, ¿Qué coño es un “anestésico literario”? Son lecturas cuya única función es evadirme de la realidad, que en mi caso son libros de fantasía, terror y ciencia-ficción. A lo largo de mi vida como te puedes imaginar he leído cientos de “anéstesicos literarios”. Pero, por mucho que quiera, nunca me harto de leer a Stephen King. Llevo leyéndolo desde los 13 años y me he leído el 90% de todo lo que ha escrito.

Mi mujer, que lleva conviviendo conmigo muchos años, se da cuenta cuando me meto de lleno en los “anestésicos literarios” pues me desconecto del mundo y sólo existe mi afán por pasar y pasar páginas hasta acabar el libro ¡Por eso tiembla cuando le digo que estoy con una novela de King!

Por eso si me conoces, y quieres hacerme bien NUNCA me recomiendes libro y sagas de fantasía, terror o ciencia-ficción  ¡Es como si le estuvieras ofreciendo alcohol a un alcohólico¡

 

Lo tengo que dejar ya porque no pararía de escribir sobre libros. Hable sobre Philip K. Dick en otro artículo.  Me tiro de los pelos de no haber dejado espacio para hablar de mi libro favorito (“El Quijote”), de mi devoción por la literatura infantil (esto es me duele menos porque escribí un artículo sobre Roald Dhal) o sobre Joseph Conrad.

Me queda pendiente volver sobre un  tema tan apasionante como la literatura y el ser humano.

¡Si eres un bibliófilo como yo, dame el gusto de intercambiar impresiones sobre lo que te han enseñado los libros! Si simplemente te ha gustado mi artículo deja un comentario o compártelo en tus redes sociales.